Buen flop, mal flop: Cómo jugar el flop en el poker

intermedio 3En un juego de información limitada, el flop te dice mucho.

Flop

Jugando después del flop

Analicemos la situación en las que entregas más información que en cualquier otra: EL FLOP.

Tienes las nuts
Las nuts son la mejor mano que un jugador puede sacar en el flop y ¡cómo se sienten bien!

Apostar en una mano como esta es un arte. Lo primero que necesitas es determinar si tu mano puede ser ganada bajo un escenario realista en la cuarta y quinta carta del flop. Recuerda que solo pierdes mucha plata con buenas manos. Tríos, incluso A-A-A, nunca deberían ser considerados una Victoria segura, pues es muy vulnerable a un full house. Y hasta una escalera debería ser considerada una mano insegura, pues te tienes que preguntar si se puede empatar o ganar. Si tienes poker, ¿existirá la posibilidad de que alguien logre una escalera color en las últimas cartas del flop?

Si la respuesta es sí, y existe una posibilidad razonable de que te derroten, entonces lo mejor que puedes hacer es apostar fuerte. Algo que asuste a los que no tienen mano e inducir a los que posean manos como dos pares a apostar. Pero hasta un color con as alto es vulnerable, pues alguien más puede juntar un full en las últimas cartas.

Por el otro lado, si la respuesta es no y no es posible que te venzan – o es altamente improbable – tus opciones son amplias. Este es ciertamente el caso de las escaleras de color o si tienes mucha suerte, una escalera real. Tríos o hasta fulls pueden ser vencidos, por lo que juzga con cuidado el nivel de riesgo que estás dispuesto a tomar para ganar el máximo posible de estas manos. Si has leído bien la mesa y sabes que hay un jugador muy agresivo en la mesa, puedes tentarlo con una apuesta que parezca débil. Este es uno de los casos en los cuales el juego lento es una buena opción. Con tan solo pasar o apostar poco, puedes hacer con que alguien reúna una mano inferior en lo que resta del flop o inducir un gran bluff. Cualquiera que sea la situación, debería pagar maravillosamente.

Tienes un buen juego
Con “bueno” nos referimos a más que un par. Estamos hablando de dos pares, tríos, full, escalera y poker. Cuando sacas una buena mano, lo mejor a hacer es respirar hondo, relajarte e intentar concentrarte en el juego. En un juego normal, tu preocupación principal es cómo sacarle la mayor cantidad de fichas en tus buenas manos – pero recuerda: solo por que tienes una Buena mano no quiere decir que no debas pensar en cómo defenderte.

Lo primero que debes hacer es observar el qué potenciales manos podrían aparecer para derrotarte – o que y ate están derrotando. Miremos un ejemplo:

TIENES EN MANO
9 Corazones9 Diamante
Y VIENE EN EL FLOP
7 Trébol9 Diamante8 Trébol

Dos cosas son obvias: en primer lugar, tienes una muy buena mano. En segundo, alguien podría ya estar ganándote con una escalera o puede q en la cuarta o quinta carta del flop le salga un trébol, juntando así un color.

Esta mano la hicimos deliberadamente capciosa para ilustrar este problema. A no ser que tengas las nuts (la mejor jugada posible hecha con las cartas que se encuentran en la mesa) no puedes dejar de lado el hecho de que vas ganando y tienes que aprovecharlo al máximo. Tener una buena mano en contra de una mano aun mejor es una de las peores situaciones en las que se puede estar en un partido de poker y muchas veces es casi imposible evitar perder muchas fichas debido a estas situaciones. Pero puedes tomar providencias que eviten que pierdas demasiadas.

Asumiendo que ninguna gran apuesta será hecha antes de tu turno, existen tres cursos de acción a ser tomados:

¿Hacer una gran apuesta?
 Apostar lo máximo en este punto en una mesa con límites tiene sentido porque querrás agarrar la mayor cantidad de fichas en este momento. Consigue que te igualen la apuesta, pero mantente atento a potenciales escaleras. En las mesas sin límite es donde la cosa se complica.Apostar demás es el sello del jugador principiante – especialmente en juego sin límite. Con toda la presión e incertidumbre rodeando al novato y su sed de conseguirlo todo en una sola mano puede ser algo muy positivo para ti. Pero viendo el ejemplo reciente, tendrás que concordar que siempre es mejor pensarlo bien antes de actuar y no precipitarse.

Una apuesta masiva – un all in o un múltiplo del pozo o de 4 a 5 veces el valor del big blind – en este punto podría producir dos resultados: 1) todos se retiran y tu te llevas un pequeño pozo a cambio de arriesgar todas tus fichas; 2) alguien te iguala con una mejor mano que la tuya y te sientes como un imbécil.

¿Juego lento?
 A muchos jugadores les gusta el juego lento y, en las circunstancias correctas, paga muy bien. Jugar lento es esconder deliberadamente una buena mano apostando poco o nada en la esperanza de que otro jugador con una mano más débil y que iguale tus grandes apuestas. Es una práctica peligrosa – especialmente cuando no tienes las nuts y, en el caso del ejemplo anterior es un suicidio. Darles a otros jugadores la oportunidad de ver más cartas gratuitamente cuando tú tienes una mano ya hecha es una receta para el desastre. Inevitablemente tu oponente hará una gran apuesta y te sentirás tentado a igualar porque tienes una excelente mano. Y así lo harás feliz.
¿Hacer una apuesta moderada?
 Tienes una buena mano, pero existe el peligro de que ya hayas sido vencido  por color. Entonces, asumiendo que no habrá más apuestas fuertes, ¿cuánto deberías apostar? Quisiéramos poder darte una cantidad exacta, pero si el poker fuera así de reglamentado, sería un juego mucho más fácil de dominar. Como siempre, las mejores respuestas vendrán cuando sepas exactamente cuál es la pregunta: “¿Qué quiero lograr con esta apuesta?”  En este caso, ya tienes mitad de la pregunta respondida examinando la mesa cuidadosamente y evaluando tu mano contra la potencial competencia. Tu conclusión: quieres que no salgan ni color ni escalera sin entregarle muchas fichas a alguien que potencialmente ya te haya ganado.

Lo que debes hacer es hacer una apuesta muy elevada para aquellos jugadores que solo tienen posibilidades de manos y no manos hechas. Un buen entendimiento de probabilidades de pozos es muy útil en este caso, pero por el momento, mantengámonos simples y digamos que apuestas una cantidad equivalente al pozo. Es suficientemente elevada para asustar a las potenciales escaleras o color – sus probabilidades son inferiores al retorno de su inversión. Jugadores que estén en busca de una jugada que igualan tu apuesta prácticamente ponen dinero en tu bolsillo.

Entonces has colocado tu apuesta y el resto de la mesa se retira en este punto – felicitaciones, has ganado el pozo en una mano potencialmente peligrosa.

O… alguien te iguala o te aumenta la apuesta en este caso. Eso dice que o logró juntar una mano o busca juntar una, a pesar del hecho de que altamente poco económico. Desde luego, también podría estar blufeando. Descubrir cuál de las anteriores es la correcta conlleva un poco de observación y un poco de adivinanza. Lo que sí sabes es que solo faltan dos cartas y es muy improbable que tu mano mejore. Si viene otra carta de corazón u otra carta que ayudara a formar una escalera, estarás en un peligro aun mayor – por lo que seguir jugando es sumamente arriesgado. A partir de ahora, cada movimiento que hagas tendrá que ser coherente con lo que crees que busca el oponente.  Pero es bueno aconsejarte que te retires ante un aumento en la apuesta o una fuerte apuesta luego de la revelación de la cuarta carta.

Tienes un buen par
Digamos que tienes un par grande (par de 10 o más) y has hecho un aumento de apuesta estándar para alejar a los débiles.

Obviamente, te encantaría juntar un trío, pero es improbable que eso pase y la segunda mejor cosa que te puede pasar es que no salgan cartas más altas que las de tu par. Si pasa lo anterior, es bastante probable que vayas ganando en este momento (tu mayor peligro es que tu oponente tenga un par más bajo que el tuyo en manos y haga un trío en el flop). Ahora quieres disuadirlo con una fuerte apuesta (pero no tan alta como para que te atrapen con una mano mejor que la tuya) evitando la posibilidad de que una carta más alta que la tuya aparezca en la cuarta y quinta carta del flop. En una situación normal, ahora no es el momento para juego lento.

Tienes el par más alto
Si en el flop te sale un par con la carta más alta que haya en la mesa, es razón para emocionarte – es una posición envidiable.

La clave para jugar con el par más alto, como cualquier otra mano, es cotizar cualquier otro peligro posible y actuar de acuerdo a ellos. ¿Puede que alguien esté a punto de juntar color? ¿Puede que alguien tenga un par de ases en mano? A pesar de que sea el par con la carta más alta de la mesa, ¿es el tuyo un buen par? ¿Qué tan fuerte es tu otra carta? Una apuesta del tamaño del pozo puede hacerte ganar la mano o, en el caso de que alguien iguale tu apuesta, te informa que alguien más tiene una Buena mano (a no ser que esté blufeando, claro).

Tienes dos cartas altas (over-cards)
 

Digamos que te salió una mano así:

Q Diamantes9 Diamante
Y el Flop Sale así.  

810 Diamante8 Trébol

Perdiste el flop, pero no estás necesariamente muerto.

La clave para jugar con cartas más altas que cualquiera del flop es ser capaz de ver la próxima carta a un precio barato o gratis. Normalmente no deberías apostar con un juego así, pero si el precio no es alto, debería valer la pena.

Tienes un par mediano
Que te salga un par mediano en el flop es como situarte en el limbo. Tienes una mano y por eso tienes suerte. Pero al mismo tiempo, tienes la seguridad de que puedes ser fácilmente vencido.

Si alguien apuesta fuerte antes que tú, ello es un indicio de un par alto – actúa de acuerdo a la lógica y retírate. Pero si nadie antes que tú ha actuado, una modesta apuesta podría convencer. Esto te dará la información sobre la calidad de tu mano sin arriesgar muchas fichas y existe la posibilidad de apropiarte del pozo en ese mismo instante. Alguien que tenga un par alto o más debería subirte la apuesta y ello indica que ya te han vencido. Si alguien te iguala, ello indica que busca color o escalera (aunque ten cuidado con el juego lento), o un par alto con una mala carta de reserva.

Tienes un par bajo
Es una situación complicada – tienes mano, pero vale casi nada.

Como regla, en un juego normal, lo mejor que te podría pasar es que veas el turn, gratis y rezar para que un trío o dos pares para hacer que esta mano se convierta en una que valga la pena investir. Una apuesta, efectivamente un bluff, con esta mano es mucho mejor que solo pagar – el bluff por lo menos crea la ilusión de que tienes una mano fuerte.

Muchos de los jugadores top dicen jugar los pares bajos de acuerdo a su presentimiento – confiando que sus instintos les servirá para filtrar las distintas situaciones. Si no estás dispuesto a arriesgar tu dinero en una corazonada, o estas preocupado a que te pueden sacar del juego con apuestas fuertes (outplayed), bota tus cartas y ahorra fichas para una situación más prometedora.

Estás buscando juego
Sacar una escalera abierta o cuatro cartas de la misma pinta en el flop siempre produce ese cosquilleo interno.

Para estos casos, existen dos líneas de pensamiento para llevar a cabo. Ambos son válidos, por lo que debes elegir el método que coincida mejor con tu estilo de juego y el estilo de juego de la mesa en la que te encuentras.

La primera opción es pasar el juego y rezar para que puedas ver la próxima carta de forma gratuita. Entonces, si es que la carta te sirve, podrás apostar con confianza. Esto tiende a servirles más a jugadores más pasivos y cuidadosos.

La segunda opción es ser agresivo y apostar. Éste es el estilo que cada vez mas jugadores están usando hoy en día, especialmente en casos como éste. La teoría es que puedes ganar la mano en ese momento – o, si no es el caso, existe la posibilidad de que armes un pozo aún mayor en el caso de que la cuarta carta te beneficie. Desde luego, hay que considerar la posibilidad de que tu carta no salga y termines perdiendo más fichas aún, por lo que se trata de una estrategia arriesgada.

Jugadores muy agresivos juegan estas manos como si ya estuvieran ganadas, hacienda grandes apuestas, incluyendo all-in. Es una técnica muy efectiva, pero siempre está el riesgo de que el hechizo se le devuelva al hechicero.

Es muy común que principiantes sobrevalúen juegos como éstos – sobre todo cuatro cartas de la misma pinta – y se queman igualando grandes apuestas. Por ejemplo, pocos entienden es que las probabilidades de terminar un juego como éste es de tan solo 34%. Y eso es solo después que has pagado para ver la cuarta y quinta carta (si no nos crees, cuenta tú mismo las cartas que te sirven). Entender las probabilidades de pozo y  las probabilidades de escaleras y poker en distintas circunstancias te dará gran ventaja para jugar estas manos.

Grandes Ases que terminan en nada
OK, el dealer te repartió estas tentadoras cartas...

As DiamanteQ Diamante
Has apostado fuerte antes del flop (tres veces el valor del big blind) y te igualan la apuesta, por lo que ahí se viene el flop:

7s4 Trébol10 Diamante

¡Eso no es lo que querías! Esta es una situación a la que te deberías acostumbrar con un gran as – te va a suceder más seguido de lo que crees (en realidad, existe una probabilidad de 50% de que no te salga la carta que quieres antes de la quinta carta).

Qué hacer a continuación depende mucho de la situación de tu juego y tu actitud en la mesa. Normalmente, aumentar antes del flop debiera asustar a tus contrincantes, con la excepción de uno o dos.

Igualar apuestas en este caso es complicado y generalmente inaconsejable – aunque seguramente es bueno igualar apuestas, cuando éstas son pequeñas. Si nadie apuesta antes que tú, es recomendable que tú también pases tu turno, esperando por una buena oportunidad en la cuarta carta del flop o…

Lo que sucede es que el flop ilustrado probablemente tampoco le sirvió de mucho a tu oponente. A no ser que él esté jugando con un par en mano, puede que vayas ganando. En este caso, es justificado apostar – por lo menos igualando tu apuesta pre-flop. Piensa en esta apuesta como una manera de afirmarte en el juego y hacer una pregunta: “Estoy muy fuerte. ¿Algo ha cambiado para ti?”. Si la respuesta a tu pregunta es una montaña de fichas dirigiéndose al centro de la mesa, lo mejor es retirarte sin pensarlo. Si él tan solo te iguala la apuesta, entonces reza por que lo mejor suceda en la cuarta carta y prepárate para el caso de que tu mano no mejore.

Aprende a retirarte
Un gran as, en especial A-K, es una combinación difícil de abandonar, incluso si no te sirven de nada. Pero recuerda que, si no juntas ningún juego, todo lo que tienes es la carta más alta – un par de 2 te derrotaría. Jugar agresivamente con estas cartas es lo correcto, pero intenta evitar comprometerte demasiado, porque a medida que el juego avanza, si no logras nada, el valor de tu A desciende.