Dejamos una mano de la WSOP para ir calentando motores.

Para jugar torneos como la WSOP se debe tener agallas y tomar la decisión correcta en el momento justo. Al parece, Daniel Negreanu está hecho para estos momentos y especialmente en Las Vegas.

El 2014, el rumano-canadiense destruyó de manera notable todas las aspiraciones de Phil Galfond, que pensó que con su all in iba asustar a todos en la mesa, pero, al final ocurrió todo lo contrario. Negreanu conectó color en el flop y solo esperó el momento correcto para aniquilar a Gandolf y de paso dejar casi muerto a Esfandari, que también había contestado la llamada de la tentación.