¿Habrá November Nine el próximo año? Eso nos preguntamos en menor o mayor medida todos. El aplazamiento de la disputa de la mesa final del evento principal de las WSOP no dejó en su día a nadie indiferente. Y es que al esperar tanto tiempo por una final no fue agradable para nadie, pues ¿quien no querría saber altiro qué pasaría?

Lo cierto es que, nos guste o no la idea, el rating televisivo de la final subió un 35% con respecto a la mesa final del año pasado e incluso los episodios previos a la disputa, de introducción de los jugadores y demás, tuvieron más telespectadores que el propio evento en 2.007.

 

Y eso es justamente lo que se buscaba con esta idea. Conseguir que los espectadores estuviesen más familiarizados con los jugadores y tuviesen, por tanto, más interés en el resultado de la mesa.

Ahora sólo queda esperar para ver qué sucede, pero desde luego yo si tuviese que apostar por algo, volvería a ser por un nuevo ‘November Nine‘ (nos guste o no, el dinero habla más fuerte).