Si hubieras ganado recientemente un premio de US$8,9 millones, ¿encontrarías que ganar US$276.000 es poquito?
Bueno, nadie se lo preguntó directamente a Johnathan Duhamel luego de que éste ganara el evento High Roller de Deauville, pero igual éste se veía bien contento. La plata ya no debe ponerlo tan feliz, sino que más bien debe ser la felicidad de ganar, que es finalmente lo mejor del poker.
Johnathan Duhamel es el nuevo ganador de la WSOP y ha expresado que no quiere ser olvidado con el tiempo, sino que mantenerse vigente, cosa que no ha sido mucho el caso de Joe Cada, Peter Eastgate o el mismísimo Chris Moneymaker, quienes han reunido un par de victorias, pero no han logrado mantenerse en el tope de la cadena alimenticia, como se esperaría de ellos.
“Estoy tan feliz, me encanta el poker”, fue lo que dijo Duhamel, en una clara demonstración de que sigue en una luna de miel, luego de su triunfo. Ojalá siga así y no se quede sólo con este triunfo.
Ahora, el próximo martes, 8 de febrero, lo veremos en una reunión de los November Nine, donde podrá demonstrar si es capaz de repetir de la hazaña. Será interesante…