Entrar en tilt mientras se juega desde casa al poker online, sin ningún testigo que pueda ayudar o parar al afectado puede ser un golpe realmente duro a la economía de cualquier jugador de poker.

Perder la cabeza y entrar en tilt al jugar al poker en directo (físico, en un casino), puede tener un coste del buy-in de la mesa, aunque probablemente te cueste poco más, mientras que sufrir dicho problema online no solo puede tener un gran coste económico, sino que puede hacer desaparecer todo tu presupuesto.

Es increíble ver de qué forma un jugador al que se le “suelta la cadena” puede intentar recuperar de forma drástica el dinero perdido entrando en juegos de mayores apuestas y así hasta perder todo el dinero.

Subir el nivel de apuestas en esta situación nunca es una buena idea ya que juegas a tener suerte y no piensas propiamente, lo que no te ayuda a tener una concepción clara de lo que estás haciendo y no te hace ser realista. En este caso, las probabilidades siempre estarán contra ti ya que no estarás optimizando tu juego, lo que te llevará a más y más pérdidas.

Incluso si no pones en riesgo todo tu presupuesto, es muy fácil que pierdas cantidades que te lleven un mundo recuperar, incluso si eres un jugador ganador.

Recuerda que si entras en tilt, comenzarás un círculo vicioso en el que comenzarás a pagar re-buys, ascenderás en los límites, apostarás sin control, quién sabe si incluso romperás algo que tengas a mano y… pasados 30 minutos, probablemente solo tengas una cuenta de poker vacía.

El consejo es que para evitar aquella situación, apenas te sientas tilt, detén la sesión, ve a dar una vuelta, toma aire y una vez tranquilo continuar, o si no, dejar la sesión para otro día.

¿Que tan a menudo entras en tilt?